La conserjería…ese pequeño espacio dentro de otro mucho más grande donde obviamente esperas encontrarte al conserje.
Hay muchos tipos de conserjería, mi comunidad de vecinos por ejemplo tiene una, en la cual se encuentra el conserje, que es algo así como un super-hombre, hace las labores de jardinería, electricidad y mantenimiento, es capaz él solito de mantener bien cuidados dos bloques de pisos de 10 plantas cada uno, y en cada planta 5 viviendas, más concretamente el de mi bloque se llama Jose Manuel, si algún día lee esto, decirle que le aprecio muchísimo, ya que si el no me hubiese regalado a Pizzi que era un coloca en los álbumes de “Colecciones Este” de las estampitas, nunca habría conseguido tener el F.C. Barcelona completo.
Bueno que me desvío, seguro que como Jose Manuel habrá muchos, pero este post no va dedicado a él…La crítica a la conserjería que me encamino a exponer va en rumbo directo hacia la diana de la educación.
Se ve que la crisis no sólo afecta a la economía, a las finanzas, al sector automovilístico o a las inmobiliares, ahora también a las conserjerías de los centros académicos. Me explico:
1º Etapa: la etapa de pequeño, cuando vas al colegio. El mío era el San Agustín en Santa Clara. Allí no había distinción entre conserjería, secretaría…allí única y exclusivamente se encontraba Tere. Tere era una mujer así medio anchita, pero muy simpática (obviamente, la simpatía como todos sabemos viene de serie con el volumen corporal de cada uno), servía para todo, que tenías una duda, te la solventaba; que querías llamar a tu casa porque te encontrabas indispuesto, llamaba; que tenías una herida, te la curaba; y como esto mil cosas más.
2º Etapa: la etapa ya en la que pasa de niño a hombre, la etapa del bachillerato, del instituto. Yo la pasé en el IES Ramón del Valle-Inclán, en Sevilla Este. Ya aquí me llevé el tortazo a las primeras de cambio. En conserjería no había una, sino dos mujeres, claro, yo supuse que como había más clases necesitarían de más gente para todas las labores. Pues no, resulta ser que es porque las tienen allí a modo parasitario, cobrando una paguita de
3º Etapa: la etapa en la que te labras tu futuro laboral, la etapa universitaria. Ya se supone que tienes una autosuficiencia, eres adulto, tienes tus amistades, y sabes lo que quieres. Pues bien, si en el instituto la conserjería sólo habría la boca para decirte esas dos frases, aquí ya te tienen más en consideración y deciden eliminar una, para sólo quedarse con la que te manda directamente a secretaría. Es indignante, de verdad, ya puedes preguntarle acerca de la matrícula del nuevo curso, como de que piensa acerca de que el oso panda asiático se esté extinguiendo, pasando previamente por el menú de la cafetería, que SIEMPRE te va a mandar a secretaría. Tal es la organización que en días claves del curso, como por ejemplo los plazos de matrícula, te den papelitos con números ordenados de menor a mayor para saber cuando tienes turno de secretaría.
Sinceramente, yo creo que en ese pequeño lugar llamado conserjería ponen sendos gatos de escayolas con un letrero en la frente que ponga “A secretaría”, iría suficiente, lo proponga desde este blog a
He dicho.
4 comentarios:
jajaja bien bien.
pero el jugador del barsa era Pizzi!! jajajaj todavia macuerdo d su cara xDDD
Pizza dice xD no tienes ganas tu de ir a la Bolero ^^
Doy fe de lo de las conserjes de las facultades sevillanas, yo he tenido que hablar con susodichas de 4 o 5 facultades y todas dicen lo mismo...
sisi,se que ere pizzi,solo q se me fui la olla
bastante bueno este tema k as sacado a la palestra hermano, no se me abia ocurrido a mi. buen trabajo ^^
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