Mi compañero de fatigas y yo nos encontrábamos esa noche trabajando en el ya famoso bar “
Andrés : “Illo, ¿Qué vamos a hacer ahora?
Juan Manuel : “Por lo pronto yo comerme el bocadillo de jamón”.
Andrés : “¿Y después?
Juan Manuel : “Ducharme”.
Andrés : “Eso lo se cojones, me refiero a cuando salgamos de aquí”.
Juan Manuel : “Suite va a estar petao fijo, va todo el mundo”.
Andrés : “¿Petao de que tiras un alfiler y se pinchan 8?”.
Juan Manuel: “No,
Andrés : “¿Qué hacemos entonces hermano?”.
Juan Manuel : “A Theatre del tirón”.
Andrés : ( tras un breve instante pensativo, me mira a los ojos)”Me encanta la frase del tirón”.
Tras este breve dialogo lleno de sentimiento y admiración recíproca (para los de
Si, el último en incorporarse este año a
Antes de nada comentar que si hubiera que ponerle alguna pega al hidromasaje sería que sale el agua “fresquita”, ya que no se encuentra instalado aun el termo, pero bueno, no es plan de buscarle los tres pies al gato (va por ti Pibe), y mucho menos de tocarle los cojones a nuestro jefe, a ver si va a ser nuestra primera y única vez que entramos en el espacio acuático.
Una vez frente a la puerta de la discoteca, nos encontramos con un amigo de la infancia agustiniana (si, uno de los participantes en las montañas de mochilas de la clase de religión), y nos comentó que la cosa estaba dificililla para entrar, que estaban pidiéndole 36€ con una consumición hasta a las mujeres, que en otras ciudades no sé, pero en Sevilla…si eres mujer…con una edad comprendida entre los 18-35 años, y llevas escote generoso, o falda de no más de una cuarta, entras en cualquier discoteca seguro, mientras que si eres hombre, una de dos :
1º)O eres Lucas de los hombres de Paco y entras por lugares por los que solo puede pasar el aire.
2º)O mides
Pues bien se da la casualidad de que mi compañero y yo no cumplimos el requisito primero por razones obvias…Lucas solo hay uno, y el segundo lo cumplimos en parte, porque “petaos” estamos, nos falta el metro noventa y el coche de gama alta.
Bueno, que me desvío. Nos pusimos en la cola, discutiendo acerca de la inversión que están haciendo las grandes empresas norteamericanas en los bancos para que la bolsa no caiga en bancarrota cuando nos da por mirar a la puerta…y ver que todo el que va delante nuestra en la cola lo mandan de nuevo en dirección la salida. Nos llega el turno, nos mira el portero de arriba abajo y viceversa, nos muestra con su mano derecha la puerta de la entrada, y nos dice un “Pasen caballeros, son 10€ con una consumición”. Obviamente acabábamos de cobrar la manteca calentita y accedimos a pagar ese dinero para entrar. Ole nuestros huevos. Una vez dentro le hicimos una llamada a nuestro amigo de la infancia para recordarle donde nos encontrábamos.
Seguimos nuestro camino y nada más entrar vimos una cantidad de mujeres que casi me asusté, en mi vida había visto tantas mujeres guapas juntas, en toda la noche ví solamente 3 ñordas (ñoña+gorda=ñorda), era algo horroroso, entonces tirando de ese arte y ese salero que me desbordan por los millones de poros que cubren mi cuerpo, le comenté a mi hermano :
Juan Manuel : “Brother”.
Andrés : “Dime”.
Juan Manuel : “Hay que ver el éxito que ha tenido el evento que creé del tuenti eem”.
Andrés : (me mira con cara más pensativa aún que la anterior) ¿Cuánto me has dicho que le daban a tus padres en esa paguita extra de la junta de Andalucía?.
Tras esta breve conversación nos encontramos al Jefe del departamento de prensa de nuestro equipo
Pues nada, lo dicho, una salida más los dos, y otro lugar conquistado, “palante, po tranco”. (quien esto último no lo entienda es que sigue sin hacernos ni puto caso y aun no ha visto el monólogo “mi familia y yo” de Dani Rovira.)